jueves, 5 de enero de 2012

ACIERTA FERNÁNDEZ

El siglo XIX español, en medio de tantos desastres, nos dejó una de las realidades que más han beneficiado al pueblo: la Guardia Civil. Dependiendo del Ejército y articulada en estructura militar, la Institución ha demostrado, año tras año, una extraordinaria eficacia en la defensa de la seguridad ciudadana y en la persecución del delito. Barnizada ideológicamente por algunos como Cuerpo de derechas, la progresía de salón, la izquierdona del caviar y el domperignon, conspiraba por unirla a la Policía Nacional y disminuir su importancia y su prestigio. Con pretextos fútiles el Gobierno Zapatero consumó la maniobra.

No se trataba de conseguir mayor eficacia en la persecución del delito. No se trataba de ahorrar en el gasto. Se trataba de ofender a la Guardia Civil, de vengarse de ciertos pasajes históricos, de vejar a un Cuerpo de seguridad que ha mantenido durante siglo y medio un prestigio indiscutido.

La primera medida que ha tomado el nuevo ministro del Interior ha sido restablecer la situación separando a la Guardia Civil de la Policía Nacional con fórmulas añadidas para un trabajo coordinado y eficaz. Acierta Fernández. La Guardia Civil no es de derechas ni de izquierdas. El gran hallazgo de Ahumada en el siglo XIX ha servido a todos los Gobiernos, cualesquiera que fuera el color que los tiñera, porque ha estado siempre al servicio del pueblo español.



Luis María ANSON
de la Real Academia Española








Fuente: El Imparcial